Piensa Verde
domingo, 11 de octubre de 2020
Te compartimos nuestro primer webinar
viernes, 9 de octubre de 2020
Impactos ambientales de la pandemia en el Perú
En ciudades como Lima, al inicio de la pandemia, se observaron mejoría en ciertos componentes de la naturaleza, tales como el aire, el agua, así se observó la reducción de los residuos en los cauces de los ríos, la disminución de la contaminación de las aguas. Asimismo, la reducción del ruido por la menor circulación vehicular y menor consumo de hidrocarburos y, por ello, disminución de la acumulación de gases de efecto invernadero en la atmósfera; también se festejaron la pronta recuperación por la fauna silvestre en las playas, mar costero y parques urbanos. Sin embargo, dichas aparentes mejoras, son transitorias e inestables, por lo mismo “rápidamente reversibles al statu quo apenas concluyan las medidas restrictivas y la vida vuelva a ser como antes”, como efectivamente de este modo se presentó.
La
pandemia del Covid 19 impacta en lo ambiental, social y económico. Sin embargo,
para muchos malos peruanos, este es un
contexto propicio para pretender realizar diferentes acciones ilícitas, en
distintas actividades humanas las que impactan en forma irreversible en nuestro
medio natural, provocando desastres ambientales, esto se
produce aprovechando la ausencia o escases de funcionarios públicos que
laboran supervisando diversas actividades económicas a lo largo de nuestro extenso territorio
nacional.
Este
es el caso de la Amazonía, en la que posiblemente
tres cuartas partes de la población o más, no siguen las medidas impuestas por el
gobierno nacional y regional respecto a
la pandemia. Muchos no las acatan porque, no pueden hacerlo y/o porque no
conocen o entienden las indicaciones, o simplemente, no creen en el riesgo
anunciado. Y, en las áreas rurales o apartadas de centros urbanos eso es aún
más agudo.
Muchos de esos impactos, como la deforestación
y la extracción ilegal de madera en curso, tendrán consecuencias en el futuro
mediato, con un recrudecimiento de quemas e incendios forestales y, en su
conjunto, las consecuencias se harán sentir especialmente a medio y largo
plazo.
Es
probable que al término de la pandemia la vida retorne a la normalidad previa,
o a una “nueva normalidad”. Sin embargo
se priorizará la reactivación económica, dejando un financiamiento reducido
para la temática ambiental, lo cual resulta muy preocupante.
Silvia Ibáñez S
jueves, 8 de octubre de 2020
Webinar: Conductas ecoamigables post COVID-19
El equipo de PIENSA VERDE los invita a nuestro primer webinar : " Conductas ecoamigables post COVID-19" que será transmitido este sábado a las 11:00 A.M vía facebook live por la pagina de https://www.facebook.com/conexion.naturalperu/ y tendrá como invitada a Liliana Miranda Sara, directora ejecutiva de Foro Ciudades para la vida
Los esperamos :)
miércoles, 23 de septiembre de 2020
¿Es la pandemia por COVID 19 un punto de inflexión hacia un nuevo paradigma ambiental?
La pandemia por la COVID 19 ha
significado una parada en la vida de las personas alrededor de todo el planeta,
no solo se paralizaron nuestras actividades cotidianas y la economía a nivel
mundial sino también muchos hogares se vieron enlutados al perder a sus seres
queridos.
Sin embargo, algo que no paso
desapercibido fueron los signos de “limpieza ambiental” detectados en los días
de cuarentena. Debido a la ausencia de personas y por ende de medios de
transporte motorizados, pudimos observar una gran mejora en la calidad de aire,
las playas llenas de aves e incluso animales cuya presencia pasaba desapercibida,
como delfines cerca de las costas. El caso no fue el mismo para los residuos sólidos,
dado que el avance que se venía teniendo respecto a la prohibición de plástico de
un solo uso en nuestro país se vio de alguna forma postergada por medidas de
higiene y prevención.
El escenario pre-pandemia
Es sabido que con la industrialización
el consumismo se ha ido imponiendo como un modo de vida, donde se tiene la
falsa ilusión de “mientras más tienes más feliz eres”. Para poder tener todo
aquello que consumimos necesitamos grandes cantidades de recursos naturales que
son extraídos y procesados por industrias primarias y secundarias, en ese afán se
destruyen ecosistemas como bosques, ríos, lagunas y otros hábitats de múltiples
especies. Y además en el procesamiento para la producción de los distintos productos
se generan una serie de aspectos ambientales, como emisiones atmosféricas,
residuos sólidos y vertimientos. Estando el tema de emisiones atmosféricas relacionado
con el infame cambio climático.
En cuanto a la basura que generamos, en el mundo somos aproximadamente
7 700 millones de personas y entre todos producimos más de 2.100 millones de toneladas de desechos de
los cuales aproximadamente el 16% es reciclado. Otro tema relevante en las últimas
décadas es el crecimiento de las ciudades, la concentración urbana que agudiza
otros temas como el estrés hídrico y el trafico en las ciudades debido al incremento del parque
automotor y por ende el impacto en la calidad de aire debido a la emisión de
material particulado y otros gases atmosféricos.
¿Han cambiado las cosas?
Como explicábamos líneas arriba los
días de cuarentena significaron una mejora en la calidad atmosférica, para muchas
personas fue una toma de conciencia sobre el rol de los ecosistemas, además el
estar en casa fue una oportunidad para algunas personas para poder empezar a
cambiar sus hábitos, por ejemplo, en cuanto a la separación de sus residuos en
casa, o tomar conciencia de la cantidad de residuos que producen.
Sin embargo, a nivel mundial hay
una gran preocupación sobre la generación de plástico donde a la lucha por una
minimización en el uso de bolsas de plástico y sorbetes o cañitas, se agregan los
guantes, mascarillas y protectores faciales, los cuales se han convertido en un
gran problema ambiental. Además, una vez levantado el periodo de cuarentena, el
tráfico en las ciudades ha vuelto a ser el mismo, lo que denota la necesidad de
repensar la forma como estamos viviendo.
Rumbo a la nueva “normalidad”
No nos cabe duda de que el coronavirus
tiene una baja mortandad en comparación con otras enfermedades infecciosas, esta
ha sido una de las peores epidemias de los últimos años dada su alto grado de
contagio, y no sabemos con certeza cuándo podremos regresar a la “normalidad” y
si sería recomendable buscar dicha recuperación imitando nuestras conductas antes de la pandemia, ya que la vida como la conocíamos
incluía una serie de prácticas que impactan negativamente al ambiente y que
están de alguna forma relacionada con pandemias como esta.